09/07/2017

Yo soy… Charlie Gard.

Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa)

La injusticia pasiva es mortífera y debilita a la persona y a la sociedad."Cada vez que vemos una injusticia y no actuamos, nos entrenamos para ser pasivos ante su presencia y así, con el tiempo, perdemos la habilidad de defendernos a nosotros mismos y a nuestros seres queridos" (Julian Assange, fundador de Wikileaks).         

Ha bajado tanto el nivel de los valores por los que la Humanidad entera ha luchado durante siglos, que se están perdiendo. La vida, la familia y el amor se valoran cada vez menos.     

07/07/2017

Si a vivir se aprende… ¡A morir también!

Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa)

Respetando todas las creencias y opiniones, sabemos poco de la vida;  y de la muerte, casi nada. El ciclo vital de un ser en el vientre materno da paso a otro ciclo fuera de la matrix; y cuando el ciclo vital  del ser encarnado en el plano humano concluye, se inicia otro sin las barreras corporales.

Suelen admitirse varios tipos de muerte y, ninguna lo es. El tema de la "muerte" es por lo menos uno de los grandes tabúes de la sociedad. ¡No pensamos en la muerte! Convendría afrontarlo por partes: 1) el dato; 2) clases de muerte; 3) el dolor y la muerte; 4) ¿la vida sigue?

08/06/2017

Civismo ¿con dosis de incivismo?

Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa)

La libertad anda suelta, pero no puede ir por donde quiera haciendo lo que le dé la gana. No lleva un GPS de civismo incorporado. Desde la familia se debe aprender, como primera regla en el Juego de la Vida, que somos totalmente responsables de todo lo que decimos, callamos, hacemos o dejamos de hacer. Y tanto lo uno como lo otro afecta a los demás y a la naturaleza.

31/05/2017

La espiga, el trigo y la prisión

Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa)

Ni todos los días, ni los meses, ni las estaciones, ni los ánimos son iguales. Mayo, por muchas razones, es especial.  Desde muy antiguo, el Romancero viejo, recoge el ciclo de la naturaleza y su influencia y repercusión en el ciclo de la vida del que se han venido haciendo eco los juglares. El "Romance del Prisionero" describe de forma lírica, la fiesta de la vida que contrasta, con la realidad del prisionero:

Que por mayo era por mayo,
cuando hace la calor,
cuando los trigos encañan
y están los campos en flor,
cuando canta la calandria
y responde el ruiseñor,
cuando los enamorados
van a servir al amor...