Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa). Publicado en el Blog del autor Esperando la Luz el 10 de Junio e 2018.
Saber no es tener un título ni haber conseguido tener cierto poder o dinero. Muchos han obtenido títulos, poder y dinero y se demostró que habían aprendido muy poco.
Las ideas y los principios puramente teóricos, en general, no suelen ser asimilados cuando la vida y la coherencia no acompañan a las palabras. Muchos han traicionado los principios y sus propias ideas, a cambio de unas cuotas de poder.
En época de crisis, surgen oportunidades de cambio. Se trata de valorar lo nuevo y lo que pueda ayudar al futuro. De forma independiente, cada año, el informe PISA intenta ver cómo se maneja la información más que cuánta información se tiene. Es decir, no trata de valorar si los alumnos (de 15 años) saben los contenidos de las asignaturas de matemáticas, ciencias o comprensión lectora, sino cómo se manejan con lo que han aprendido o ignoran.
Ante tanta palabrería, dinero y fracaso escolar que, repercute en el futuro de unos y de otros, las empresas han vuelto a poner la mirada en la experiencia. La experiencia «es cara» pero «enseña muy bien», y es fiable. El sistema educativo actual ofrece «títulos» pero ayuda muy poco a pensar. De hecho, después de titularse, la mayoría de los jóvenes, no tienen salida laboral o tienen que «hacer prácticas», -en la mayoría de los casos abusivas al no estar remuneradas-.
El Sistema ha fracasado, está politizado y manipulado, las escuelas tradicionales -públicas o concertadas-, están obsoletas. Muchos educadores se quejan de la falta de respeto en las aulas, o de la pérdida de autoridad de los profesores. Para no tener problemas se aprueba, al por mayor, o se baja el nivel. -Un consejo que viene, a veces, impuesto desde los despachos-.
Algunos cuestionan el rol del profesor. Alfredo Alvar ha dicho que: «El sistema educativo destruye el Estado nacional». ¿Es motivar a los alumnos o conseguir la docilidad en su comportamiento o por lo menos el respeto? Mientras, el reto de los alumnos no parece que sea «aprender», sino «aprobar». Aprobar como sea. Incluso filtrando los exámenes de acceso a la Universidad, (acaba de suceder en Extremadura). ¿Es beneficioso para la sociedad futura, que el contribuyente siga financiando este tipo de educación? ¿Se puede cambiar? ¿Se puede encontrar trabajo en los próximos años sin aprender a saber ni conocer qué trabajos habrá?
Por supuesto vamos hacia una revolución en términos educativos. Hay mucho en juego y poca claridad. De una experiencia de las que van a cambiar la enseñanza actual o deberían haberlo hecho, quiero hablar hoy. El cambio puede no ser tan rápido como sería deseable, por la falta de confianza de los políticos. En España, los docentes están siendo sometidos a una dictadura lingüística territorial y en muchos casos a directrices de eficacia que nada tienen que ver con el nivel escolar. Además, muchos profesores, pueden ver, en cualquier modificación del sistema educativo, una amenaza para su propio futuro. Pero hay que hacerlo.
En todo caso, ¿no es el aprendizaje de los alumnos lo que importa?. Hay un problema de autoridad de los profesores en las aulas. No suele ser fácil lidiar día a día con niños y adolescentes, cuando los padres y el entorno social no ayudan. El futuro está en juego. ¿Hay iniciativas?
«El agujero en la pared»: ofrecer los medios para que los niños aprendan solos.
«El agujero en la pared», Hole in the Wall, (por sus siglas en inglés), es la experiencia y el sueño de Sugata Mitra, un científico y profesor que ha puesto en práctica, una escuela en la Nube.
Según él, los niños aprenden solos. Tienen inquietudes y se enseñan unos a otros. La clave son las preguntas, los retos. Según él, «las grandes respuestas a la educación está en las preguntas».
La tecnología, el entretenimiento y el diseño están revolucionando el mundo, pero ni los gobiernos ni el sistema de enseñanza lo han asimilado masivamente. Los alumnos, usan tecnología en casa, móviles o Tablets y ordenadores, pero se aburren en clase. Y los profesores suelen considerar los móviles una distracción para sus clases. ¿Se han dado cuenta de que Internet abre un nuevo rol para el profesor y para la educación?
Sugata Mitra, nació en Calcuta, India, el 12 de febrero de 1952 . Es Doctor en física y profesor de tecnología educativa de la Universidad de Newcastle, Reino Unido, donde reside.
En 1999 colocó una computadora en una habitación que daba a un barrio marginal en Kaljaki, Nueva Delhi. Para ello abrió un hueco en la pared y acercó la computadora al agujero, para que los niños pudieran acercarse y usarla. El experimento pretendía probar que los niños pueden aprender de los ordenadores con mucha facilidad sin ningún entrenamiento formal. y de forma «minimamente invasiva«, (Minimally Invasive Education )(MIE).
El docente innovador, Sugata Mitra, se reveló como uno de los grandes revolucionarios digitales, por su apuesta por el auto aprendizaje. Fue invitado por la organización que promueve la tecnología, la educación y el diseño para exponer su iniciativa. Su conferencia fue valorada como la más inspiradora y con más potencial. La Organización Tecnología, Entretenimiento y Diseño, TED, (por sus siglas en ingles) le otorgó, uno de los 3 premios que concede anualmente, dotado con 100.000 euros. Eso le lanzó a la fama internacional
Desde entonces, gracias a esa dotación económica, pudo ensayar su experimento en otras zonas marginales o remotas, poniendo el ordenador, con acceso a internet al alcance de los niños. Y siempre con éxito.
Independientemente de la historia británica que cuenta, su experiencia, ha mostrado al mundo, que quienes nada sabían de computadoras, ni de inglés, comenzaron a buscar, jugar y navegar. Está convencido que pueden aprender por sí mismos lo que se propongan. ¿Qué necesitan? Encontrarse en un ambiente y unos maestros que estimulen su curiosidad y les dejen libertad para investigar. No se trata de escuchar, copiar, memorizar. Es otra cosa.
Su propuesta educativa ya se conoce como SOLE (del inglés de Self Organised Learning Environments), es decir, entornos de aprendizaje autoorganizados. La experiencia de estos entornos se practica en algunos colegios de más de 50 países de la mano de the School in the Cloud. El sistema de almacenamiento en la nube o cloud computing de Apple Inc. fue lanzado el 12 de octubre de 2011 y desde 2012, el servicio cuenta con más de 150 millones de usuarios. [enlace]
Claves del SOLE: aprender lo que interesa.
Cambiar el sistema no es fácil pero es necesario y posible. Aunque sea un riesgo. Como decía L. Da Vinci: «aunque la naturaleza comienza con la razón y termina con la experiencia, es necesario que hagamos lo contrario…comenzar por la experiencia y desde ella terminar por investigar la razón».
Sugata Mitra lo intuyó así también. Partir de lo que hay: niños, sueños, preguntas, ordenadores… y en grupo… llegar a responder, conocer y aprender. Alguien ha dicho que «los mejores maestros son los niños» pero, no se ha confiado en ellos, casi nunca. Sin embargo:
1).- Si dejamos la obligación, que se impone desde preescolar… en un ambiente adecuado, el aprendizaje llega casi de forma natural y espontánea. El niño y el joven, el adulto y todos pueden sorprenderse y sorprender. No está previsto de antemano, ni se impone, lo que deben aprender. Solo hay, confianza y medios.
2).- Con una presencia mínimamente invasiva, en ese entorno, los niños, jóvenes y adultos, pueden aprender lo que les interesa, de forma autónoma, despertando el interés. Ellos encuentran lo que quieren y les interesa, y lo que el grupo prioriza.
3).- La tecnología digital es esencial y debe estar conectada; tanto en entornos rurales y alejados como en los núcleos urbanos. No sería necesario mover a los niños o jóvenes de su entorno, como ahora sucede con los CRA: Colegios Rurales Agrupados. Cualquier Ayuntamiento puede conseguir la tecnología y ponerla a disposición de alumnos, con un máximo de 5, por ordenador y alguien que supervise y formule las grandes preguntas.
4).- La organización y el aprendizaje surgen casi espontáneamente en ese entorno adecuado. Todo llega, casi por sorpresa, para mejor aprender, distribuyendo el trabajo y compartiendo los resultados. Se deja al individuo, elegir o encontrar el grupo. Luego pasa del yo al nosotros. Eso ayuda a la reinserción social y al trabajo futuro, cuando llegue su momento. Nadie queda excluido o marginado. Cada uno es útil cuando aprende y puede ser útil cuando trabaje. El auto-aprendizaje, puede descubrir tanto capacidades de dirección como de colaboración.
5).- Ser mínimamente invasiva, no quiere decir que no necesite de alguien (dirigente o profesor) que plantee, las grandes preguntas, que despierten la curiosidad y anime a trabajar para responder. Esa chispa, será el detonante que haga elevar la curiosidad en cada uno y al grupo. La nueva educación debe basarse en un plan de estudios en y torno a grandes preguntas. Esas preguntas interesantes, difíciles, abiertas, e incluso sin solución, son clave. Despertarán lo mejor de cada uno, ahora durante el aprendizaje y, también para el futuro. Ese es el papel del docente o del profesor. Hay gente que nunca se ha planteado ninguna pregunta importante. Se han dejado llevar por la inercia en el periodo de aprendizaje y, no han cambiado.
6).- No se trata de hacer cima, sino disfrutar de la escalada. En términos de aprendizaje, el proceso y el cómo es muy importante. No es cuestión de encontrar respuestas a todo. El proceso, la búsqueda, el razonamiento, la colaboración, las destrezas que se adquieren e incluso los errores y las equivocaciones, ayudan a aprender. Por eso son muy importante. Con ello se prepara a las personas para la vida y para encontrar trabajo. Recordemos, que se puede. [enlace]
La vida, como la gran escuela de aprendizaje.
Quienes aceptan el reto de Sugata Mitra, dicen que habría que cambiar todo el Sistema actual, no solo para que los niños puedan aprender, lo dicen sobre todo, porque habría que comenzar cambiando toda la carrera de maestros o de docentes. Los actuales no están, en general, capacitados para una docencia «mínimamente invasiva» y para hacer grandes preguntas.
Pero no hay que olvidar lo básico. Se puede aprender de todo. Los genes, la vida y la calle, aunque muchos no lo crean, enseñan.
La prueba es que pueden llegar a triunfar. La experiencia siempre es importante. La historia del saber, no se inicia o aparece en cada nacimiento. Sabemos muchas al nacer. El sistema actual no le da mucha importancia, pero la tiene. ¿Cómo se explica que un bebé de 2-3 años comience a hablar en inglés, una lengua, que ni sus padres ni su entorno conocen?
El método Sugata, inspiró en parte, el argumento de la película -hindú-británica. nominada para 10 Oscar, y ganadora de 4 Globos titulada Slumdog Millionaire de Danny Boyle. Cierto que la pelicula está basada en la novela ¿Quién quiere ser millonario?
Jamal Malik, el concursante de 19 años, responde preguntas en la versión india de «Quién Quiere Ser Millonario». Explica que, conocía las respuestas de la mayor parte de las preguntas por casualidad, debido a lo que le había sucedido en su vida, transmitida en una serie de escenas retrospectivas (flashbacks) en los que se documentan los detalles de su infancia.
Es la otra cara de la moneda, llamada aprendizaje. Aprendemos juntos. Todos somos maestros y discípulos (docentes y alumnos), desde la cuna hasta el final.