Los pasados días 10, 11 y 12 de marzo se celebró en el Palacio Arzobispal de Alcalá de Henares el Congreso titulado «La familia cristiana y la escuela católica: Minorías creativas para la renovación de la sociedad», en colaboración con el «Pontificio Instituto Juan Pablo II para estudios sobre el matrimonio y la familia». El Congreso fue presidido por el Obispo Complutense Mons. Juan Antonio Reig Pla. Al Congreso se inscribieron 353 personas procedentes de la diócesis y de otros muchos lugares. Además, para facilitar una participación más amplia, las ponencias fueron retransmitidas en directo por Internet (adjunto).
Partiendo del presupuesto anunciado por Juan Pablo II «el hombre no puede vivir sin amor» (Redemptor hominis, 10), en el Congreso se ha puesto en evidencia la necesidad de la luz de la fe que ilumina las relaciones humanas y la necesaria referencia a Cristo, quien revela el hombre al mismo hombre y le descubre la grandeza de su vocación (Cf. Gaudium et spes, 22).
Por Ana Fuentes. Publicado en Actuall el 1 de Enero de 2017
Francisco ha advertido de la "apatía" y "frialdad" que reinaría en una sociedad sin madres porque estaría dominada por el "cálculo y la especulación" sin dejar cabida a la piedad. Recuerda que sin la familia no se puede crecer en humanidad.
El Papa ha reivindicado a las madres como el “antídoto” frente al egoísmo y al individualismo y ha alertado contra la “orfandad espiritual” que ha definido como “un cáncer que silenciosamente corroe y degrada el alma”.
Por Roberto German Zurriaráin, Doctor en Filosofía. Licenciado en Teología. Profesor de Didáctica de la Religión de la Universidad de La Rioja, publicado en Blog de Roberto Germán Zurriaráin el 8 de Octubre de 2016
3. Las graves secuelas psicológicas que quedan para los hijos y las madres.
Los expertos han insistido en la importancia de los lazos que se crean entre la madre y el hijo durante el embarazo y su importancia en el futuro desarrollo de hijo, cabe presuponer que un embarazo considerado como un negocio y la relación con un hijo al que se renuncia de antemano y al que se considera como un producto y una fuente de ingresos, pueda afectar al correcto desarrollo psicológico del niño, más aún cuando sepa cuál es su origen, y de la madre que le ha gestado y dado a luz y tiene que separarse de él o ella. Algunos pretenden, sin embargo, hacer creer a la sociedad que un “vientre de alquiler” es algo aséptico, sin consecuencias psicológicas ni para la madre ni para el hijo.