Más que nunca urge proteger la vida de los Down
16/11/2012
Héroes anónimos… impagables
20/11/2012

Estimadas Pilar y Begoña:

Soy un colega que ha recibido un correo difundido por ustedes con la intención política de que se permita seguir eliminando a nuestros pacientes fetales, especialmente a los que más graves están, y para ello promueven entre la profesión una carta que debe ser firmada en apoyo de la Ley Aido y en contra de la intención del actual Gobierno de proteger la vida del paciente fetal y de reducir el número de abortos eugenésicos. He leido con mucho interés y atención su carta y desearia que ustedes también leyesen con interés este correo. 

En su carta mezclan datos cientifícos de tipo epidemiológico con opiniones de caracter ideológico y argumentos de tipo emocional subjetivo, con la intención de que siga siendo posible la eliminación de los pacientes fetales más graves a manos de ginecólogos sin responsabilidad de tipo penal cuando la madre decida "voluntariamente" la muerte de su hijo enfermo.

Al respecto me gustaria hacerles algunas observaciones desde un punto de vista deontológico y bioético porque el contenido de su carta supone una grave violación de la ética médica justificada con aparentes motivos compasivos que, paradojicamente, causan graves daños en la salud sexual, el futuro reproductor de muchas mujeres y su salud mental, además de suponer la matanza de varios miles de pacientes fetales al año en nuestro país.

Ustedes, en su carta hacen un alegato de la ideología prodecisión de eliminar a los hijos que, por la razón que sea, sean indeseables tras su diagnóstico prenatal. Su carta revela su posición abortista, a pesar de que pretendan pasar por neutrales al considerar que son tan partidarias de que las mujeres no aborten como de que aborten. (Seria el colmo que fuesen partidarias de que todas tuvieran que abortar necesariamente y a la fuerza). En otras palabras, estan defendiendo un derecho de autodeterminación y para conseguirlo consideran legítimo el matar a un ser humano inocente de toda culpa y sin capacidad de legitima defensa, solo porque su esperanza vida puede ser muy corta, por que todavia son muy jóvenes e inmaduros ,porque nacerán con un alto grado de dependencia o de discapacidad, porque necesitarán de muchos cuidados médicos que costarán dinero y esfuerzo, o porque moriran pronto, ya sea intrautero o tras el parto. Un postulado de autodeterminacion semejante defienden los apologetas del terrorismo que cosnsideran legitimo, para hacerlo efectivo y defender sus intereses, acabar con la vida de inocentes si es preciso.La diferencia estriba en que ustedes lo justifican fundamentándolo sólo en que se sufre mucho, en que para eliminar al hijo enfermo tendrán que ir a otro país en el que la vida no esté protegida y que eso cuesta mucho dinero, o en que se las "obligará" a recurrir a un aborto ilegal que ustedes llaman "clandestino", a pesar de que serian realizados mayoritariamente por colegas que tienen instalados negocios de aborto y contracepción y no por esas curanderas de antaño ya hoy practicamente inexistentes. Sus argumentos, no tienen nada de cientificos ni de médicos, son los mismos tópicos que siempre han utilizado los sectores pro decisión de matar y los que inspiraron la ideológica ley 2/2010 que elaboró el ya extinto ministerio de igualdad.

La percepción del sufrimiento no es racional sino de tipo emocional, son las emociones frente al sufrimiento las que determinan la vivencia subjetiva del sufrimiento, no la razón. Se trata de un absoluto subjetivo. Hay quienes ante la percepción del sufrimiento y las dificultades se superan y quienes se desesperan, pero un buen consejo médico acorde a la ética médica siempre irá orientado a realizar un refuerzo positivo incluso en situaciones dramáticas. Las emociones a menudo son más fuertes que la razón, sin embargo es la razón la que es capaz de modular la emoción. Un ejemplo muy claro lo tenemos con la emoción que origina el impulso sexual. Si nos dejamos llevar por la emoción podria ser que nos sintieramos inclinados a tener una relación sexual con cualquier persona que nos despierte el impulso, sin embargo nuestra razón nos indica que a lo mejor no resulta conveniente hacerlo.Por ello sus argumetos sentimentales no son racionales, no son fruto de pensar con la cabeza sino con las entrañas, se trata de argumentos muy viscerales que conducen , nada más y nada menos, que a matar a una persona en gestación que será discriminada, mediante el diagnóstico prenatal, por su edad y por su salud. En ello, evidentemente , no hay ninguna razón de tipo médico. Más aun cuando conocemos numerosos estudios que nos hablan de las secuelas que sufren las mujeres como consecuencia de participar en la muerte intencionada de los hijos de los que están embarazadas. Incluso los abortistas más radicales están de acuerdo en que el aborto es un drama.La razón del drama y del trauma es obvia: supone que una mujer acepta que una cadena de ginecólogos maten a su hijo.

En este sentido, me gustaria preguntarles varias cosas: ¿A cuántos pacientes fetales han eliminado ustedes como médicos, cuántos feticidios han practicado ustedes? ¿Si no los practican, cúal es la razón? ¿Cuántos pacientes fetales cribados y diagnósticados de Sd Down por ustedes han conseguido salvar y cuántos, gracias a su "excelente" diagnóstico, han resultado "interrumpidos"? Igualmente con respecto a los pacientes con espina bífida, labio leporino o incluso cardiopatias curables o compatibles con la vida extrauterina como el Fallot. ¿Qué situación clínica, a parte de la muerte fetal, es incompatible con la vida intrauterina? ¿Cual es la razón médica para eliminar a un paciente con corta esperanza de vida, en concreto cual es la razón médica, no emocional, para acortar la vida de un anencéfalo? ¿Es necesario desde un punto de vista médico que la autopsia para ofrecer un consejo genético para futuras gestaciones sea tras un feticidio o es también válida si se realiza tras la muerte espontanea del paciente fetal o del neonato? ¿También son partidarias de ejecutar, por las misma razones, al neonato que nace con anomalias cuando no se han diagnosticado antes del parto? ¿Los ejecutarian ustedes mismas? ¿Quién creen ustedes que deben ser los que asuman la función de verdugos en esos casos?

En su carta dicen una cosa que es falsa, entiendo que debe ser porque no han leido bien la ley del 85 ni la de 2010 y por eso han creído que no facilita la eugenesia. La ley del 85 permitía el aborto eugenésico sólo hasta la semana 22, la del 2010 lo permite sin límite de plazo (art 15.c) cuando se trate de lo que el legislador llamó "enfermedades graves e incurables en el momento del diagnóstico o incompatibles con la vida".

Es falso que la nueva ley haya acotado y precisado cuales son esas circunstacias como sostienen ustedes, el texto legal no especifica ninguna de ellas. Quien lo ha hecho ha sido la SEGO en deleznable sumisión y eso no es ley a pesar de muchos crean que cuando diagnostican algunas de las enfermedades contenidas en los listados de la SEGO hay que aconsejar el feticidio y facilitarlo. ¿Piensan ustedes que el Sd Down es una enefremedad grave e incurable en el momento del diagnóstico? Puede ser que alguien lo piense, por ejemplo Guillermo Antiñolo cuyo comité clínico en el Hospital Virgen del Rocio de Sevilla autorizó y ejecutó en 2011 el feticidio de un Down diagnosticado en la semana 32 en el Hospital Virgen de Arriatxca de Murcia por Juan Luis Delgado.

Saben ustedes que el EUROCAT publicó que en Europa el 88% de los Sd Down resultan eliminados mediante una "TOP" tras el diagnóstico prenatal y que el ECEMC publica que en España la prevalencia de Sd Down ha disminuido en un 60% desde que se despenalizó el aborto por riesgo de anomalia fetal grave. Saben ustedes que en el último año se produjeron en España 3300 feticidios por discriminación fetal (la causa fetal) y que la proporción con respecto a la cifra total de abortos se mantiene constante alrededor del 3% todos los años a pesar de que en cifras absolutas, y gracias a la extensión de los cribados poblacionales, aumente año tras año. También saben ustedes que, curiosamente, la probabilidad de que la naturaleza humana produzca un "malformado" coincide con ese 3%. Sabrán tambien que en los últimos cuatro años unas 11.000 personas que deberian haber nacido con discapacidad o corta esperanza de vida han sido eliminadas tras el diagnóstico prenatal y que desde el el año 85 la cifra asciende a unos 40.000 y todo ello con la colaboarción de "médicos" especialistas en medicina fetal y diagnóstico prenatal. Quizá les parezcan muy pocos y por ello sean partidarias de seguirlos eliminando solo porque su madre lo pida si sufre. Deberian reflexionar sobre una cuestion fundamental ¿sus diagnósticos prentales salvan más vidas de las que eliminan?

Me gustaria saber si ustedes se han molestado en leer los trabajos publicados en Prenatal Diagnosis a cerca de las secueles en la salud mental de las mujeres -y sus parejas- que optan por la interrupción feticida de un hijo con diagnostico prenatal de anomalia. También si se han precupado de hacer un seguimiento a esas mujeres, si les han preguntado alguna vez sobre su autoestima, sobre sus relaciones de pareja desde el aborto, sobre si tienen pesadillas, si lloran cuando nadie las ve, si pueden hablar abiertamente con alguien del tema o si se sienten vetadas para hacerlo. Me temo que será un tema tabú que no les interese mucho, muy ocupadas estarán haciendo punciones y ecografias y publicando los casitos exitosos que tienen o sobre la eficiencia de los cribados de cromosomopatias. Sin embargo, para una mujer y su salud no es lo mismo participar en la muerte de su hijo, o que un hijo se le muera espontaneamente. No es lo mismo morirse que ser matado. Y no es lo mismo un médico que mata que un médico que no mata. Su posicionamiento politico ideológico y contrario a la deontología médica implica que deben ser los ginecologos los que deben prestarse a matar en algunas circunstancias al paciente fetal grave, o incluso al no grave como los Down. A esto es a lo que están ustedes contribuyendo con esa carta, a perpeturar la implicación de los especialistas en diagnóstico prenatal en la eugenesia, a seguirlos comvirtiendo en policias y verdugos, cómplices necesarios de un crimen de naturaleza homicida. En definitiva contribuyen ustedes a la desnaturalización de la medicina fetal que entiende al feto como un paciente. Para ustedes no todos los fetos son pacientes, algunos son simplemente desechos reproductivos no merecen ser cuidados y acompañados hasta su final sino que deberán ser eliminados cuanto antes por el bien de su madre, de la sociedad y del progreso médico.

Yo les invito a que reflexionen profundamente sobre todo esto, sobre la deriva eugenesica del diagnóstico prenatal y los cribados poblaciones, porque nuestra responsabilidad en el asunto es inenegable y seremos juzgados por la Historia como lo fueron los médicos juzgados en Nurenberg y que también alegaron en su defensa que gracias a ellos se consiguieron salvar algunas vidas de enfermos mentales y que a los que seleccionaban para ser ejecutados lo hacian por compasión,para evitar sufrimientos.

Estos también se justificaron en que estaban cumpliendo la ley: Quedan autorizados para disponer cuánto sea necesario, a fin de que los enfermos considerados incurables, a tenor de los conocimientos actuales, se los pueda eliminar físicamente para poner fin a sus sufrimientos’. Adolf Hitler. Cancillería del Fuhrer. Berlín, 1 de septiembre de 1939.

Atentamente.
E. Rodriguez.
Especialista en Ginecología y Obstetricia

CíViCa
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Ciencia | Cultura | Vida Asociación de Investigadores y Profesionales por la Vida.