Los denominados programas de cribado prenatales, especialmente los destinados a cribar enfermedades incurables como las cromosomopatías, qué, tanto las sociedades científicas como las autoridades políticas sanitarias, promueven de forma sistemática a toda la población gestante (0), están impregnados de una ideología que se obliga a asumir como justa y necesaria y que, sin embargo, es contraria a la deontología médica. En Andalucía ese programa de se denomina PACAC (Programa Andaluz de Cribado de Anomalías Congénitas) incluido en el Plan de Genética de Andalucía.
El marco legal hace que los ginecólogos nos movamos en un contexto en el que el buen uso (terapéutico) del diagnóstico prenatal y el mal uso (eugenésico) son inseparables. Probablemente la implementación de estos programas de selección que discriminan a los seres humanos por motivos de salud en las etapas más precoces de la vida de las personas está consiguiendo salvar menos vidas que las que favorecen destruir mediante el aborto y está desnaturalizando el papel social del médico como custodio de la vida y la salud….