Edición genética en embriones humanos. Inglaterra abre la veda ante una comunidad científica dividida

Día Mundial de las enfermedades raras (29 de febrero)
29/02/2016
El otro lado del derecho en diálogo con Gustavo Zagrebelsky
02/03/2016

Enviado por Justo Aznar, Director del Instituto de Ciencias de la Vida de la Universidad Católica de Valencia y miembro de CíViCa, publicado en Observatorio de Bioética, el 11 de Febrero de 2016

La Human Fertilisation and Embryology Authority (HFEA) de Inglaterra ha aprobado una solicitud del Francis Crick Institute para usar por primera vez las nuevas técnicas de edición genética (VER AQUI) en embriones humanos (VER AQUI).

La investigación estará dirigida por la doctora Kathy Niakan. El objetivo del grupo es, en principio, saber qué genes son necesarios para que el embrión humano se desarrolle con éxito. Así esperan poder mejorar en un futuro la viabilidad de los embriones obtenidos por fecundación in vitro y desarrollar nuevos tratamientos contra la infertilidad. No obstante, una vez abierta la veda a este tipo de estudios, otras aplicaciones serán investigadas.

Enviado por Justo Aznar, Director del Instituto de Ciencias de la Vida de la Universidad Católica de Valencia y miembro de CíViCa, publicado en Observatorio de Bioética, el 11 de Febrero de 2016

La Human Fertilisation and Embryology Authority (HFEA) de Inglaterra ha aprobado una solicitud del Francis Crick Institute para usar por primera vez las nuevas técnicas de edición genética (VER AQUI) en embriones humanos (VER AQUI).

La investigación estará dirigida por la doctora Kathy Niakan. El objetivo del grupo es, en principio, saber qué genes son necesarios para que el embrión humano se desarrolle con éxito. Así esperan poder mejorar en un futuro la viabilidad de los embriones obtenidos por fecundación in vitro y desarrollar nuevos tratamientos contra la infertilidad. No obstante, una vez abierta la veda a este tipo de estudios, otras aplicaciones serán investigadas.

En las investigaciones se utilizarán embriones sobrantes de tratamientos de fecundación in vitro, que serán observados durante los primeros siete días de desarrollo. Posteriormente serán destruidos.

Las repercusiones éticas de esta decisión son notables. Por un lado, numerosos embriones humanos serán manipulados y después destruidos, lo cual es moralmente inaceptable. Menos trágico, pero también enteramente reprobable, es el hecho de que se trata de una modificación genética germinal, pues al modificar un embrión en un estado de desarrollo tan temprano, la modificación aparecerá en todas sus células y sería transmisible a su descendencia. De hecho, es, por los riesgos que esto plantea, que solo se permitirá vivir a los embriones durante siete días, pues las consecuencias de esta modificación genética temprana son impredecibles. Sin embargo, la aprobación de estas experiencias nos sitúa en una slippery slope (pendiente deslizante) hacia la implantación de la modificación genética de la línea germinal en la clínica, que a su vez podría conducir a la práctica de la mejora genética.

La aceptación de estas investigaciones se da en un momento en el que la comunidad científica se encuentra ampliamente dividida a este respecto y en el que todavía se está debatiendo la pertinencia de dar este paso. Además de todos los inconvenientes éticos que plantea la modificación genética de la línea germinal, usarla para estos fines podría desprestigiar una tecnología altamente prometedora en otros campos de aplicación mucho menos controvertidos.

CíViCa
CíViCa
Ciencia | Cultura | Vida Asociación de Investigadores y Profesionales por la Vida.