Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa)
Después del éxito del Concierto de la Fundación "Corazones por la Infancia", del 13 de Agosto y antes de que viajara a Perú, pude conversar con Teresita, una persona que conoce como nadie ese hermoso país llamado Paraguay. Un país que ha dado la vuelta al mundo, con la visita del Papa, pero aún muy poco conocido.
-Por si alguien no conoce Paraguay, en esa visita se pudo ver una muestra de lo que somos capaces de hacer con nuestras manos. Es una nación que con poco hacemos grandes cosas. ¡Con maíz y coco hacemos un altar! Con el arte y la fe que lleva dentro, sorprendió al pontífice y al mundo.
Por José Manuel Belmonte (Dr. en Ciencias Humanas por la Universidad de Estrasburgo, miembro de CiViCa)
Después del éxito del Concierto de la Fundación "Corazones por la Infancia", del 13 de Agosto y antes de que viajara a Perú, pude conversar con Teresita, una persona que conoce como nadie ese hermoso país llamado Paraguay. Un país que ha dado la vuelta al mundo, con la visita del Papa, pero aún muy poco conocido.
–Por si alguien no conoce Paraguay, en esa visita se pudo ver una muestra de lo que somos capaces de hacer con nuestras manos. Es una nación que con poco hacemos grandes cosas. ¡Con maíz y coco hacemos un altar! Con el arte y la fe que lleva dentro, sorprendió al pontífice y al mundo.
En efecto, los medios extranjeros calificaron como una obra magistral el altar (tenia 25 metros de alto por 14 de ancho) que diseño el artista paraguayo Koki Ruiz. Fue realizado en 2 meses con maíz, coco y otras semillas.
Pero, además del arte, hay otra cara también real, que ni se puede ocultar, ni minimizar. Tu sensibilidad, tu trabajo y tu lucha están muy cerca de la gente y de su vida, en las dificultades diarias de quienes más lo necesitan. A mí me sorprendió tu llamada de Socorro en el mes de julio, que es invierno en tu país…
–Sí, no podía callar. Hace un año pedía ¡¡SOCORRO!! y la reacción de este Paraguay tan hermoso fue extraordinaria. Pero este año estábamos de vuelta en la misma situación: Indígenas sufriendo frio y hambre. Por eso volví a decir: ¡¡¡NECESITO DE USTEDES AMIGOS!!!
¡¡¡Necesitamos Carpas y abrigos!!! Pueden traerlos hasta la escuela y procederemos a armarlos todos juntos. ¡¡ Dios los bendiga!!
La gente respondió y pudimos poner nuestro granito de arena para arreglar la situación de mis compatriotas.
Estoy seguro, que fue mucho más que un grano de arena. Sin embargo los problemas sociales -en general- sobrepasan o desbordan lo que alguien como tú pueda hacer, ¿o no es así?
–En lo que estoy de acuerdo y tengo claro es que los problemas sociales deben ser atendidos por todos los ciudadanos. Todos, absolutamente todos, podemos hacer algo por los demás, y por más ocupados que estemos, siempre hay tiempo para hacer algo por los demás. El gobierno solo, no puede ser el responsable del bienestar de la gente, de hecho soy una convencida de que los que tuvimos la bendición de tener algo, debemos pensar y ayudar a quienes no han tenido las mismas oportunidades. Es cierto que nuestro trabajo es lo que nos lleva a un bienestar, pero también es cierto, que muchos nacimos en ambientes más favorables. No podemos olvidarlo ni olvidar a los demás.
Creo que el lector intuye que estamos hablando con una gran mujer. Es el momento de preguntarnos y preguntarle, para quien no la conoce: ¿Quién es Teresita Benegas O´Hara?
–Soy paraguaya, nacida en la capital del Paraguay, país que se encuentra en el corazón de América del Sur. Tengo 50 años y hasta hoy día vivo aquí, en Asunción.
Mi padre era contador público y mi madre docente del área culinaria y empresaria. Tengo 5 hermanos.
Desde muy pequeña viví mucho la presencia de Cristo en mi vida, en mi familia y en mi colegio. Estudie en el colegio María Auxiliadora, y el espíritu salesiano me cautivo desde el principio. Allí aprendí algo tan sencillo como agradecer lo que Dios me envía cada día y entregarle todo lo que yo pueda hacer cada día. Hasta hoy lo sigo haciendo.
Hoy soy docente, Lic. en Educación, Maestra de educación Primaria y Universitaria. Me dedico totalmente a la empresa familiar y soy además, Maestra panadera-confitera, experta en Arte Culinario.
Soy la Directora General de “O´Hara” Escuela Integral Gastronómica, y estoy 100 % abocada a la tarea de formar jóvenes para que sean profesionales de la cocina.
Y eso te ha permitido recorrer el mundo, o por lo menos muchos países…
Sí, he recorrido el interior de mi país, además de países de Latinoamérica llevando la cocina de mi tierra, fui varias veces invitada a congresos internacionales, durante 3 años estuve en Utilísima TV, en Argentina, los “Especiales de Cocina Paraguaya”. Y en mi país estoy en TV, medios periodísticos y revistas escribiendo artículos y recetas de cocina.
Lo cual indica tu preparación y capacitación profesional incontestables. Pero con ser importante el aspecto profesional no es más que uno de las dos alas que permiten volar. ¿Cuál es la otra?
Sí, la otra, no es menos importante: es mi familia. Estoy felizmente casada hace 27 años con Antonio Rafael Cabrera Burgos, de profesión ingeniero Civil. Tenemos 4 hijos Arami de 26 años, Joaquín Antonio de 25, Juan José de 23 y María Fernanda de 20. Todos estudiantes universitarios.
Estas dos alas te han permitido desarrollar una vida muy activa. ¿Tal vez porque estas alas o estos pilares te permiten descubrir una panorámica social que no te deja indiferente?
Así es. Soy una persona muy activa. Procuro estar atenta a las necesidades de la gente, y creo que lo que viví en mi juventud y lo que he podido descubrir en mis viajes me ha hecho entender mucho la problemática de mis compatriotas.
Estoy atenta por sobre todo a las necesidades de la niñez y los indígenas de mi país. Las mujeres embarazadas y sin apoyo, es tema sensible en mi país. Estamos en deuda con ellas, es muy doloroso, por sobre todo con las adolescentes y jóvenes violadas y como consecuencia embarazos con muchos problemas. La justicia no castiga severamente estos actos, y la mujer esta indefensa.
Como mujer y como madre me revela y me compromete. De hecho trabajo mucho con la niñez desprotegida y abandonada, muchas veces a causa de que la mujer se encuentra muy sola y desprotegida.
Comprendo que como mujer y como madre tengas una sensibilidad especial por esos temas de justicia social, pero ¿tienes también, para afrontar esos retos, el apoyo de la familia?
Este es un tema muy relacionado con la actividad que hacemos en mi familia, ya que estas mujeres que he mencionado, al verse tan desprotegidas, abandonan a sus bebés en diferentes lugares. Son esos bebés los que en muchas ocasiones han llegado a nuestra casa.
Lo que acabas de decir es muy importante. Me gustaría que nos explicaras ¿cómo has podido dar ese paso, o cómo, tu gran corazón ha podido comprometer a la familia en esa hermosa tarea?
Un día viendo la TV una familia cuenta su experiencia de cuidar a chiquitos abandonados. Manifestaron la gran necesidad de que más familias se animasen a realizar lo mismo. Plantee a mi esposo y a mis hijos la posibilidad de que nos implicáramos y yo la primera. Al comienzo se asustaron. La primera pregunta fue ¿cómo vas a poder con tanto trabajo que tienes mami? Les dije que probásemos, que si nos dábamos cuenta que no podíamos lo dejábamos, pero que sin probar nunca sabríamos de lo que somos capaces.
Así que nos entrevistaron a cada uno de los miembros de la familia y luego de unos meses empezamos esta ¡¡maravillosa misión!! Desde ese día formamos parte de las familias acogedoras de la Fundación “Corazones por la Infancia”. Desde hace 10 años en mi hogar, en mi familia, recibimos bebitos abandonados. Somos “Familia Acogedora”.
Estos chiquitos llegan a nuestros brazos, porque por alguna razón la madre ha decidido que no los podría cuidar y los entrega directamente a la Secretaria de la Niñez, o lo dejan en los Hospitales, o a veces incluso en parques o basureros. Para mí son ángeles enviados por Dios y lo primero que digo es gracias por su vida Señor. No juzgo nunca a la madre, rezo por ella y agradezco que no lo haya matado.
Sabiendo que tugenerosidad no tiene límites porque siempre podemos brindar una mano amiga a quien lo necesita, dinos por lo menos, para terminar y para que los lectores estén atentos a nuestra próxima cita, ¿cuántos bebés habéis acogido?
Nada trajimos, nada llevaremos. Lo importante es lo que ayudemos o lo que demos de tiempo, de saber, de amor. Hasta hoy, han llegado a nuestra casa 12 bebitos.
Admirable, sin duda. Lo dejamos ahí. El espacio y el tiempo, en los medios de comunicación, es limitado. Vamos a seguir hablando contigo, si nos lo permites. Vamos a emplazar a los lectores para que puedan descubrir próximamente algo más de esa tu maravillosa experiencia humana, ¿te parece?
Estaré encantada de que la gente en España y en el mundo, gracias a vosotros, sepa lo que estamos haciendo aquí en Asunción.
Teresita, una profesional llena de humanidad, con la fe que lleva dentro, nos sorprendió hoy. Seguro que podremos aprender mucho más y más detalles en el próximo artículo.