País anfitrión se distancia de reunión de la ONU para jóvenes

Por Rebecca Oas, Ph.D. Publicado en C-FAM el 14 de Diciembre de 2012 (Traducido por Luciana María Palazzo de Castellano)

Rebecca Oas informa sobre un foro proabortista para jóvenes convocado la semana pasada en Bali. No es de sorprender que la reunión, que estuvo patrocinada por el Fondo de Población de la ONU, exigiera el aborto y en gran medida. La Asociación Mundial de las Muchachas Guías y las Guías Scouts participaron. Qué triste.

NUEVA YORK, 14 de diciembre (C-FAM) Al aproximarse el vigésimo aniversario de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD), los activistas a favor del aborto señalan las prioridades que los gobiernos deben asumir durante los próximos veinte años. Para tal fin, el Fondo de Población de la ONU junto a diversas organizaciones no gubernamentales organizaron la semana pasada en Bali el Foro Mundial de la Juventud CIPD, que fue promocionado por sus patrocinadores como una «oportunidad sin precedentes para influir en la política mundial».

Los participantes fueron preseleccionados por los organizadores, que quisieron garantizar la uniformidad de opiniones. Según el Fondo de Población, asistieron seiscientos «delegados» de la juventud, un tercio menos de los novecientos previstos, y aproximadamente dos mil quinientos participantes en línea. La concurrencia se mostró escasa a lo largo de la conferencia. Emcee Robert Skinner, de la Fundación de las Naciones Unidas, dio inicio a una de las sesiones matutinas atribuyendo con optimismo los muchos asientos vacíos a que la gente estaba «allá afuera, relacionándose, haciendo amigos, pasándola bien. Y eso es de lo que se trata». 

Las recomendaciones del foro de jóvenes eran meras sugerencias, pero el Fondo de Población dijo que se añadirán al informe del Secretario General de la ONU que se presentará ante la Asamblea General y afirmó que ellas «ayudarán a definir las prioridades de desarrollo para los próximos veinte años».

Las prioridades de los organizadores estuvieron claras desde las primeras palabras  ofrecidas por dos jóvenes miembros del comité directivo, ambos empleados de organizaciones proabortistas. Pidieron con insistencia que los «servicios seguros de aborto» sean accesibles para las jóvenes y dijeron que el género no debe ser visto en sentido «binario». En el comité directivo también había representantes de la Federación Internacional de Planificación de la Familia, de la Asociación Cristiana Femenina, y de la Asociación Mundial de las Muchachas Guías y las Guías Scouts, así como miembros del gobierno de Indonesia que organizaron la actividad.

En consonancia con los temas introductorios, el documento final recomienda la despenalización del aborto y la eliminación de las restricciones a los servicios de aborto, que incluyen los períodos de espera, el consentimiento de los padres o del cónyuge y la edad de consentimiento. La declaración también sugiere la educación sexual integral que «incluye información sobre orientación sexual e identidades de género libre de la intolerancia religiosa», la despenalización del trabajo sexual y el reconocimiento gubernamental de un concepto de familia «en continua evolución».

No todos los «delegados» estuvieron de acuerdo con el aborto. Una solitaria joven llamada Mónica señaló durante una sesión general que «no todos los jóvenes de mi país, de Indonesia, están de acuerdo con él» y añadió que «el aborto no se trata solamente de la madre… también se trata del bebé, de los derechos del bebé». Sus observaciones fueron recibidas con aplausos indecisos. Los moderadores desviaron su pregunta a los asistentes, y una joven ecuatoriana la desestimó diciendo con enojo: «mientras mantenemos estos debates basados en la intolerancia religiosa, hay muchas jóvenes que están muriendo». 

Concluido el foro, el representante del gobierno de Indonesia en el comité directivo pareció distanciarse de las recomendaciones efectuadas en dicha reunión. El dr. Eddy Hasni enfatizó en el periódico Jakarta Post que todas las recomendaciones deberían ser coherentes con la CIPD de 1994, y que «algunas… particularmente sobre los abortos seguros, de hecho no están en línea con el marco internacional».

«Deberíamos ser muy cuidadosos en este tema, ya que todavía continúan los debates morales y religiosos», señaló.